Cuántas veces nos hemos pedido decir a nosotros/as mismos/as la frase de “necesito un nutricionista”. O se la hemos oído a amigos/as o familiares. Afortunadamente, vemos desde nuestra farmacia que el interés y la conciencia por una alimentación más sana y equilibrada crece cada vez más en la sociedad. Aprender sobre hábitos y alimentos que nos beneficien para así cuidarnos mejor y gozar de una buena salud.
Tradicionalmente, cuando se necesitaba acudir a un nutricionista, siempre o casi siempre tocaba ir a consulta privada. Otras personas lo hacían a través de la Seguridad Social, pero no se tenía la sensación de recibir un seguimiento y una dedicación acorde a la necesidad existente. Apreciamos con satisfacción que cada vez más y más usuarios/as descubren el servicio de consulta nutricional y seguimiento que tenemos en la farmacia. Esa accesibilidad, inmediatez y experiencia que desean en un servicio con nutricionista, fácil y cerca en su farmacia de siempre en Zaragoza.
Un nutricionista en nuestras vidas: ¿Por qué?
Nadie mejor que nuestra compañera Ana para responder a esta pregunta. Además de graduada en Nutrición humana y dietética, ejerce como técnico en farmacia y parafarmacia y como técnico de laboratorio de análisis y control de calidad 😀.
Ana trabaja con pasión con pacientes y resto de usuarios/as de Farmacia Moreo para desterrar ese viejo pensar que todavía tienen algunos de que la función de un nutricionista sólo se limita a pautar dietas para perder peso. Nada más lejos de la realidad. “Se recurren a soluciones rápidas, y se entra en una continua montaña rusa con el peso”, afirma. Su labor como nutricionista va mucho más allá. “No nos enfocamos exclusivamente en la pérdida de peso. Un experto en salud educa al paciente en una alimentación adecuada, considerando su situación fisiológica y patológica”.
La sempiterna asociación entre nutrición y peso deja de lado otros conceptos para Ana aún más importantes. “La ayuda de un nutricionista puede ser necesaria no solo para perder peso, sino también para prevenir patologías, mejorar síntomas si los hubiera, y en diferentes etapas de la vida, como el embarazo, la lactancia, la vejez, la infancia y la adolescencia”.
Además, añade Ana, está el deporte y el estado físico, “fundamentales en la gestión de desórdenes alimentarios y alergias, en cambios de estilo de vida, y en la recuperación de lesiones”.
Neófitos en una alimentación saludable: Comencemos por aquí
Pensar que necesito un nutricionista en Zaragoza o en cualquier otra ciudad es una buena señal, sin duda, para mejorar nuestros hábitos alimenticios. En ausencia de información segura, “es fundamental recurrir a un profesional cualificado, como un nutricionista colegiado” aconseja Ana. La mejor manera de iniciarnos en los conceptos básicos de una alimentación saludable antes de transformarlos, definitivamente, en un hábito constante de nuestra vida.
Debemos aprender que la mejora de estos hábitos alimentarios siempre debe adaptarse a las necesidades fisiológicas y patológicas del paciente. “Dado que cada individuo tiene requerimientos específicos, es crucial contar con información precisa y basada en evidencia para realizar cambios efectivos y seguros en la dieta”. Gracias al enfoque personalizado y fundamentado que Ana, nuestra nutricionista especialista, proporciona a los pacientes que nos visitan en la farmacia, éstos mejoran sus automatismos alimentarios de manera segura y sostenible.
Razones detrás de una mayor concienciación social sobre la nutrición
La accesibilidad a nueva y abundante información sobre alimentación en medios online y convencionales (sobre todo en los primeros) lleva años poniendo a la nutrición en boca de todos. Para bien o para mal.
Para Ana, hay un punto de inflexión evidente: la pandemia. Impulsó y expandió una mayor conciencia social sobre la importancia de la nutrición. “Los confinamientos y el trabajo desde casa modificaron los hábitos alimentarios de muchas personas, quienes comenzaron a prestar más atención a los ingredientes y la calidad de los alimentos que consumen diariamente”.
En aquella etapa tan delicada para toda la sociedad, hubo una fuerte campaña a través de la salud pública, apoyada en las redes sociales y medios de comunicación, sobre la importancia de una dieta saludable y equilibrada. Todo ello motivó a los pacientes a buscar profesionales cualificados para mejorar su salud.
Jóvenes y adultos, todos concienciados
En su trabajo en la farmacia con los pacientes, Ana destaca que este cambio positivo en concienciación sobre nuestra alimentación diaria ha sido igual de notable entre jóvenes y adultos. “Están más conscientes de la importancia de su salud y están dispuestos a hacer cambios en su dieta para prevenir enfermedades y mantener un estilo de vida saludable”, asegura.
Necesito un nutricionista: Acudo a las redes sociales
Entramos en un territorio donde el debate es permanente. Lo bueno y lo malo que aportan las redes sociales la mayoría de usuarios/as lo conocen, pero cuando la búsqueda de información es relativa a cuestiones de salud, el peligro emerge. Desinformación, falsos profesionales, consejos sobre productos o tratamientos no testados científicamente…
Todavía hay mucha gente que desconoce que en algunas farmacias como en la nuestra, Farmacia Moreo, disponemos de un servicio de consultoría y seguimiento nutricional. Si supieran que lo tienen tan accesible, a lo mejor muchos de estos usuarios de las redes no se atreverían a seguir pautas dictadas por perfiles sociales de dudosa capacitación.
Para Ana, la proliferación de estos perfiles es “preocupante”. La falta de formación y evidencia científica en la mayoría de estos consejos rápidos en las redes “subraya la importancia de acudir a profesionales cualificados como nosotros, las farmacias, para recibir orientación nutricional basada en la ciencia y adaptada a las necesidades individuales”.
Consejo que siempre transmite Ana a cualquier usuario de la red en busca de ayuda nutricional, “que la persona o personas que siga en las redes, sea nutricionista colegiado”. No podemos estar más de acuerdo con ella.
Farmacia Moreo: Tu nutricionista en Zaragoza
Nadie mejor que Ana Galán, quien está a la cabeza de nuestro servicio de consulta nutricional en la farmacia, para explicar en detalle en qué consiste.
“El primer paso consiste en una evaluación inicial, que comienza con entrevistas y cuestionarios detallados, como el recuerdo de 24 horas y el cuestionario de frecuencia de consumo de alimentos”, explica. “El objetivo es recopilar información relevante sobre el estilo de vida y los hábitos alimenticios del paciente para establecer objetivos claros”.
Información y datos objetivos de cada paciente, que se combina con un historial médico que incluye antecedentes de enfermedades, condiciones crónicas, medicamentos en uso y cualquier intervención médica relevante. Gracias a este análisis, Ana y su equipo recopilan una información vital para así tener en cuenta factores que puedan requerir ajustes específicos en el plan alimentario.
“A partir de estos datos – prosigue – se lleva a cabo un análisis de la composición corporal utilizando una báscula de bioimpedancia. Con la información recopilada, se diseña un plan que incluye porciones, frecuencias de comidas y recomendaciones específicas para la ingesta de macronutrientes y micronutrientes”.
Ana nos especifica que este plan es dinámico, y que siempre puede ajustarse a medida que el cliente avanza hacia sus objetivos, a través de las distintas consultas de seguimiento que se irán llevando a cabo.
Diferencias con un servicio de nutrición privado
“La principal diferencia radica en la cercanía y la confianza que se puede ofrecer al paciente”, responde convencida Ana. “En un entorno profesional como el de una farmacia, los pacientes suelen experimentar un trato más personalizado y cercano, lo que facilita una comunicación abierta y sincera. Esto nos ayuda a comprender mejor sus necesidades y preocupaciones”.
La empatía y conexión personal son clave. Ana sabe que cuando los pacientes “se sienten apoyados y comprendidos en cada etapa del proceso”, la eficacia del plan nutricional y el bienestar general del paciente, salen reforzados. Y es así cómo actuamos en Farmacia Moreo.
Ver la nutrición saludable como un compañero de viaje
Cada vez más gente ve la nutrición mucho más allá de la dieta. Algo permanente y no acotado en el tiempo detrás de un objetivo único: perder peso. Ana lo define a la perfección: “La nutrición es una inversión continua en la salud”. Ha de verse como un hábito constante, no como un esfuerzo concreto.
“La nutrición debe ser vista como una parte integral de la salud. Un componente esencial del bienestar general, espeta la especialista. Todos conocemos ya a estas alturas que una nutrición adecuada previene de enfermedades, mejora la calidad de vida y el funcionamiento óptimo del cuerpo.
Conclusiones
La recomendación de ir de la mano de un experto en salud como son los/as nutricionistas en nuestra educación alimenticia, ya veis que está más que demostrada. Para Ana Galán, nuestra especialista en Farmacia Moreo, “la clave está en la individualización”. Hay que tener en cuenta el estilo de vida, los gustos y las necesidades nutricionales del paciente, para así, lograr una mejor adherencia a la dieta y asegurar que los nuevos hábitos se mantengan a largo plazo.
Si queréis poneros en sus manos y mejorar definitivamente vuestra salud general a través de una alimentación saludable y controlada, os esperamos en Farmacia Moreo 🙂.
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Farmacéutico, especialista en cosmética y técnico en ortopedia.
Vocal de Dermofarmacia del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza.
Gerente en Farmacia Moreo.