Inflamación crónica vs Inflamación aguda.
La inflamación es una respuesta natural del sistema inmunológico ante lesiones, infecciones u otros daños. Se distinguen dos tipos principales de inflamación: aguda y crónica.
La inflamación aguda es inmediata, de corta duración y generalmente beneficiosa: aparece de forma repentina tras un daño (por ejemplo, un corte en la piel o una infección) y dura desde unas horas hasta pocos días. Sus signos clásicos son evidentes en la zona afectada: enrojecimiento, calor, hinchazón y dolor, reflejo del aumento de flujo sanguíneo y la llegada de células inmunitarias para iniciar la reparación del tejido lesionado.
En cambio, la inflamación crónica es un estado persistente y prolongado (meses o incluso años) en el que el cuerpo continúa enviando células inflamatorias aun cuando no hay una amenaza aguda. Este estado sostenido suele ser más sutil en sus manifestaciones iniciales, pero con el tiempo los procesos que normalmente nos protegen pueden volverse perjudiciales, causando daño en tejidos sanos y disfunción orgánica. De hecho, la inflamación crónica subyace en una amplia gama de enfermedades humanas (artritis, diabetes, enfermedades cardiovasculares, etc.), siendo un factor común de gran impacto en la salud pública. Es importante destacar que las enfermedades inflamatorias en general contribuyen a más de la mitad de todas las muertes a nivel mundial, lo que subraya la importancia de entender y controlar la inflamación crónica.

Impacto de la inflamación crónica en la salud de nuestra piel.
Como hemos comentado en múltiples ocasiones, la piel no es un envoltorio pasivo, se trata de un órgano y como tal cuando la inflamación se vuelve crónica puede impactar en ella en distintos niveles:
Daña la barrera protectora de la piel
Cuando la piel está sana, protege frente a irritantes, gérmenes y mantiene la hidratación. Pero la inflamación crónica debilita esta barrera, provocando sequedad, descamación y sensibilidad. Además, al dañarse, genera aún más inflamación, creando un círculo vicioso difícil de romper.
Acelera el envejecimiento de la piel
La inflamación continua degrada el colágeno y la elastina, dos proteínas esenciales para mantener la piel firme y joven. Esto favorece la aparición de arrugas, flacidez y un aspecto envejecido. Incluso puede dañar el ADN y dificultar los procesos de reparación celular.
Provoca problemas cutáneos persistentes
Los signos más frecuentes son enrojecimiento, picor, sequedad y eccemas que no terminan de curarse. Enfermedades como la psoriasis o la dermatitis atópica empeoran con esta inflamación mantenida. Además, las heridas tardan más en cicatrizar y aumentan las infecciones cutáneas.
Puede afectar a todo el organismo
La inflamación de la piel no se queda solo en la piel. Las sustancias inflamatorias pueden pasar a la sangre y afectar a otros órganos, favoreciendo problemas como obesidad, enfermedades cardiovasculares o incluso alteraciones del estado de ánimo.
El papel de los exosomas en el inflamaging.
Los exosomas, gracias a su capacidad para transportar señales biológicas, actúan modulando esta inflamación a nivel celular. Sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y regeneradoras permiten reducir la producción de citoquinas proinflamatorias, estimular la regeneración tisular y proteger las células frente al estrés oxidativo, ayudando así a frenar los efectos visibles del envejecimiento asociado al inflamaging.
PRO EXOSOMAS EGF 50 ML AIRLESS

PRO-EXOSOMAS EGF ha sido formulado precisamente para actuar sobre este tipo de procesos inflamatorios subclínicos que aceleran el envejecimiento. Gracias a su combinación de activos biotecnológicos de última generación, trabaja a varios niveles de la piel:
- Exosomas de Centella Asiática: actúan como potentes antiinflamatorios naturales. Reducen los mediadores que provocan la degradación del colágeno (como TNF-α o interleuquinas inflamatorias), a la vez que estimulan la síntesis de colágeno y elastina. Además, aportan efecto antioxidante y ayudan a calmar la piel.
- Exosomas biomiméticos con Bakuchiol: estos exosomas son vehículos inteligentes que penetran en capas profundas de la piel llevando el Bakuchiol, un activo similar al retinol, pero sin sus efectos irritantes. El Bakuchiol favorece la renovación celular, mejora las líneas de expresión, regula el sebo y tiene propiedades antiinflamatorias, siendo ideal incluso en pieles sensibles o reactivas.
- Péptidos biomiméticos y Factores de Crecimiento EGF: estimulan directamente la actividad de los fibroblastos, aumentando la producción de colágeno y elastina, mejorando la firmeza, reduciendo arrugas y mejorando la textura global de la piel.
- Exonolona: un activo muy eficaz en pieles sensibles, que calma, uniforma el tono, reduce las rojeces y mejora la tolerancia cutánea, ayudando incluso en pieles con cuperosis, rosácea o hipersensibilidad.
- Textura Sorbete: ligera, de rápida absorción y muy agradable al aplicar, lo que permite que los activos penetren de forma rápida y segura sin dejar sensación grasa.

Farmacéutico, especialista en cosmética y técnico en ortopedia.
Vocal de Dermofarmacia del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza.
Gerente en Farmacia Moreo.